“.. siembra tu propio jardín
y adorna tu propia alma,
en lugar de esperar a que alguien te lleve flores.”
Verónica Shoffstall
Solemos creer que tenemos en un grado óptimo nuestra autoestima, pero solo cuando estamos sobre terreno advertimos que no está tan bien como pensábamos. Decimos, por ejemplo, que nuestra autoestima está alta, sin embargo, no tenemos la suficiente confianza para desarrollar un proyecto y dudamos de nosotros. Este es el momento de revisar nuestra Autoconfianza y, de paso, tomar en cuenta, en esta introspección, el Autocuidado.
¿Qué es la Autoestima?
Es el amor que tenemos por nosotros mismos, es la capacidad de reconocer nuestra valía. Tú dirás: “pero yo estoy bien con eso”.
En diciembre del 2020 tuve el covid, la verdad fue bastante benévolo conmigo. El post-COVID fue para mí una experiencia tanto dolorosa como enriquecedora. Todos los días enfermaba de algo diferente y, hago la salvedad, nunca he sido hipocondríaca, ni he manipulado a nadie con la presión de una enfermedad. Mi familia y mis amigos lo notaron. Yo me sentía de muerte lenta y pensé que no lograría sortearla.
Fueron de gran ayuda en mi recuperación el apoyo de mi familia y las oraciones de todos. Guardo un sentimiento de gratitud perdurable por este invaluable acompañamiento.
¿Tu Valor?
En medio del caos en el que me encontraba descubrí, a través de una conversación con mi hijo, que tenía disminuida mi autoimagen. Esa fuerza interior tiene que ver con la capacidad demostrable en el hacer. ¿Qué eres capaz de hacer con lo que sabes? ¿Tienes la habilidad de transformar una realidad? ¿Cómo te proyectas desarrollando tus habilidades?
En ocasiones creemos que lo que hacemos de forma natural todos lo pueden hacer. Y no es así. Cada uno de nosotros viene dotado de su propia “caja de herramientas” y es eso lo que nos hace únicos. Ese es nuestro valor, la manera como “brillamos”. En cada cosa que hacemos dejamos un sello, una huella que nos caracteriza. Cada uno de nosotros ve la realidad y puede transformarla de diferente manera.
El Despertar
Recuperarme, y sentir que volvía a la vida, me cambió la perspectiva. Sentí que el universo me había otorgado otra oportunidad y era el momento de cambiar lo que no me gustaba, lo que no me hacía felíz y lo que podía mejorar. Cuando reafirmas tu valor, te empoderas y ese empoderamiento te hace volver a la vida y sentirte capaz de lograr todo lo que te propongas: arriesgarte a cumplir tus sueños sin miedos.
Autocuidado
Antes de esta crisis, yo no era mi prioridad. Nunca lo fui. Era el momento de enamorarme de mí misma, me había tenido olvidada y en la lista de personas importantes en mi vida no aparecía ni siquiera de última. Esta es la reflexión que deseo que hagas hoy. Te pregunto ¿estás en tu lista? ¿Encabezas la lista? Si no apareces por ningún lado, significa que hay mucho por ajustar. La primera vez que lo escuché me pareció un sacrilegio, una visión egoísta. Luego entendí lo profundo del mensaje. Si tú estás bien, todos van a estar bien.
Pretender ayudar a otros a mejorar su Autoestima, Autoconfianza y Autocuidado, sin reflejarlo en nosotros mismos, no muestra coherencia con nuestro discurso. Fue así como inicié una serie de tareas, actividades y decisiones que ayudaron a mi autocuidado. Pensé más en mí y, de acuerdo a mis capacidades, generé un plan sistemático. El ejercicio de autocuidado no se trata de algo que se hace un solo día, de iniciar caminatas en el parque o inscribirte a un gimnasio y nunca volver. Exige un cambio de actitud. En mi caso sirvieron algunos masajes faciales y corporales, algunas sesiones de Reiki para que recuperara mi mejor YO, disfrutando de una nueva y mejor versión de mí misma. Se trata de sentir lo felíz que eres al cuidarte y que sigas gratificándote. Algo tan simple como esto: las flores nos las pueden obsequiar, pero no hay necesidad de esperar a que lo hagan, nosotras también podemos regalárnoslas.
Reafirmar el aprecio por mi misma y reforzar mi autocuidado me ayudaron a elevar mis niveles de autoconfianza. Seguramente tú tendrás tu propio método. Comparto esta experiencia para que muchas personas, que se sienten identificadas, sepan que no están solas, que no son las únicas enfrentando situaciones difíciles o de riesgo y que sí hay una salida gananciosa que nos hace sentirnos más felices.