Un año más para crear conciencia de la importancia de construir sociedades más equitativas. En pleno siglo XXI todavía tenemos pueblos marginados por su color y sin cubrir sus necesidades básicas como el agua potable por ejemplo. No solo en Buenaventura, Colombia sino también en otras partes del globo como Ghana, Mozambique, Zimbabue y Costa de Marfil en el África.
A todos nos corresponde edificar al ser humano, en este caso a nuestras negritudes. Construir una sociedad con base en la equidad, la tolerancia y el respeto por la diferencia desde el vientre y los niveles del preescolar, es tarea de todos. Como parte de una familia y de una comunidad todos debemos tener ese compromiso de dignificar el ser humano. Igualmente les corresponde al gobierno local y al gobierno central.
Es importante formar desde nuestras escuelas, a niños y niñas que conozcan sus derechos como seres humanos y enseñarles que todos somos parte fundamental de una sociedad sin importar el color de la piel. La sociedad se forma desde la familia. Necesitamos padres y madres de familia mas conscientes de su responsabilidad desde lo que dicen y como lo dicen al referirse a las negritudes. La discriminación la llevamos en nuestra cultura.
De forma práctica y en el aquí y el ahora, podemos trabajar en nuestras familias para crear conciencia del valor del ser humano independiente de su color y convivir sin discriminar. Si iniciamos hoy, en 20 años podremos tener una nueva y mejor sociedad con el cambio que queremos y todos merecemos.