Uno de los procesos que me causaba mas dificultad era la toma de decisiones, era insegura al momento de definir cual era la mejor opción. En ocasiones dejaba que otros decidieran por mi y esto generaba una gran insatisfacción. Cuando inicie mi proceso de cambio, entendí el gran poder que se genera en la toma de decisiones.
Cuando iniciamos el re-direccionamiento de nuestra vida, nos enfrentamos a conceptos nuevos, es así como surgen nuevos aprendizajes, nuevas estrategias y herramientas. Toda toma de decisiones genera un riesgo: el riego a equivocarnos, pero hay que asumirlo para lograr aprender y crecer como seres humanos.
Una buena práctica es leer las biografías de los grandes líderes de la historia, conocer sus vidas y como enfrentaron los desafíos, nos dará la fuerza para enfrentar los nuestros, todo es susceptible de cambio, lo primero es descubrir y aceptar que tenemos dificultades para la toma de decisiones. “Los líderes en todos los campos de la vida son personas que deciden con rapidez y firmeza” N. Hill
Paso siguiente será construir el habito de tomar decisiones con rapidez, confiando en nuestro criterio. Cuando tomamos decisiones reafirmamos nuestro estado de libertad y debemos a prender a disfrutar de ese privilegio al igual que asumir las consecuencias.
Inicia por decisiones pequeñas, crea el hábito y veras como tu autoconfianza mejora, confía en tu criterio así te equivoques y descubre el poder que adquieres cuando tomas tus propias decisiones.
Escribe tus comentarios a proyectatubienestar@gmail.com con gusto atenderé tus inquietudes.
Fraternalmente,
Liliana M. Villanueva P.
Trabajadora Social
Especialista en Educación Superior
“Cuando afianzas tu Fé, tienes la certeza del éxito”
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